Praga, la ciudad gótica

Praga es considerada como la ciudad más representative del estilo gótico en Europa (que de paso no tiene nada que ver con el estilo Art-Deco de Ciudad Gótica de la serie Batman, mas asociado con Nueva York). Y también es una ciudad con muchas leyendas; existen muchas historias para cada rincón de la ciudad. La ciudad es relativamente pequeña y puede recorrerse a pie, en parte por sus calles estrechas donde no pueden transitar vehículos. Pero no toda la ciudad tiene tal estilo antiguo.

Han logrado mantener su estilo y sus monumentos a pesar de las diferentes acciones del siglo 20. La entrada a la ciudad muestra suburbios mas modernos aunque se denota mucho el legado del comunismo del siglo 20 por sus edificios mas funcionales que estéticos y con aspecto poco amigable. Es posible ver también algún asentamiento dentro de los bosques que bordean la ciudad donde vive gente pobre. Es aquí que uno cae en cuenta de la diferencia existente entre la Europa del este y occidente. También el hecho de tener que cambiar euros a coronas a una tasa de 30 coronas por 1 euro. En la ciudad existen muchos sitios de cambio de moneda y algunos establecimientos aceptan euros como pago aunque no sea la moneda estándar; y es que Praga tiene una fuerte entrada de ingresos por parte del turismo. Existen varios tours y servicios dedicados a esta industria aunque no a la altura del resto de Europa occidental pero se nota que están tratando de crecer como país.

Los hechos transcurridos en la segunda parte del siglo 20 dieron una nueva mentalidad a la gente de la ciudad, pues si bien existen mas de 300 iglesias en Praga el ateísmo suma un 60% de la población. Y es que durante la época comunista era prohibida la profesión de cualquier religion. Iglesias tan importantes en el mundo católico tienen su cede aquí como por ejemplo la iglesia del Niño de Praga o también la de San Nicolás con impresionantes detalles y escultura a las cuales llegan peregrinos de todo el mundo. De hecho pude entrar a misa a la iglesia de Niño de Praga y ésta era dada en inglés.

Otro dato muy interesante es que el género musical mas popular es el Hip-Hop y es común ver establecimientos con este tipo de música o autos con alto volúmen sonando, mientras que en la Europa occidental lo común es la música electronica en establecimientos y silencio en las calles. Es notorio cuando se tiene oprimido un pueblo que luego de ser liberado quiera ponerse al nivel de sus vecinos pero sin tener noción.

República Checa ha crecido en muchos aspectos pues es la entrada a Europa del este y su industria ha visto un alza en calidad y productos. Se pueden encontrar almacenes con ropa y otros porductos de marcas reconocidas. La gente que trabaja en puestos ejecutivos se denota por su vestimenta formal de alta costura. Aquí pude observar a una pareja una tarde que se dirigían caminando hacia el palacio municipal donde se presentaría un concierto de Mozart y Beethoven: la señora, de traje largo negro muy elegante con guantes de seda negros y el señor, con smoking y sombrero de copa. Y es que a esos eventos se debe presentar uno vestido para la ocación. También tiene su parte no tan glamorosa pues se puede encontrar alguna basura tirada en las calles y uno que otro indigente pidiendo dinero.

Parte de las tradicionales leyendas circulan alrededor de sitios muy visitados que han jugado un importante roll en la historia de la ciudad, como por ejemplo los huevos en la construcción del Puente de Carlos, el brazo atorado del ingeniero del Reloj Astronómico, el Molino del Canal del Diablo y mas recientemente la calle Nedurova. Hay muchos lugares que visitar y cada uno tiene su belleza particular y única.

Por falta de tiempo no tuve oportunidad de dar un tour por las diferentes cervecerías del lugar las cuales son de muy buena calidad. Entre ellas se encuentra Budweiser, pero no se confundan no tiene nada que ver con la marca norteamericana, ésta es una empresa local de Budweis que es una ciudad checa de orígen alemán. Pude probar ésta y otras marcas checas en mi estadía las cuales me parecieron muy buenas sin nada que envidiarle a las cervezas occidentales.

Pretender dar un resúmen de esta ciudad en un espacio tan pequeño como este es pecar de inosente por que en vez de darlo prefiero pensar que he despertado la curiosidad y el ánimo de querer saber más de esta emblemática ciudad.